Así puede cuidar de su bienestar emocional

Para el lavado de los dientes se requieren, si está bien hecho, unos 6 minutos al día. Así mismo, quienes van al gimnasio, dedican una hora diaria a su cuerpo. Ahora bien, ¿qué tantos minutos se dedican al bienestar psicológico?

El doctor en psicología de la Universidad de Nueva York, Guy Winch, asegura en su libro Primeros auxilios emocionales: Rechazo, culpa, fracaso y otras heridas cotidianas (Plume, 2014), que “sufrimos lesiones psicológicas comunes, como rechazo o fracaso, con la misma regularidad que pasa con los físicos, como cortes o rasguños. Pero si bien somos extremadamente conscientes de la necesidad de curar esas heridas tan pronto como ocurren, cuando se trata de nuestras lesiones psicológicas, somos extrañamente apáticos”.

No hay la misma conciencia. Pedro Vélez, psicólogo clínico del Centro de psicología integral, agrega que las psicológicas presentan exactamente los mismos riesgos para el bienestar emocional: “Lo que pasa con la cabeza no siempre es falta de fuerza de voluntad. Si usted tiene neumonía no solo con intentar pararse de la cama se va a curar. Son enfermedades que deben tratarse”.

El dolor emocional, que es diferente caso a caso, puede “infectarse” si se ignora. Las heridas emocionales, enfatiza Winch, seguirán doliendo si no se aplican los equivalentes emocionales de los ungüentos y los vendajes.

Así que antes de entrar a engordar las cifras de salud mental que incrementan como espuma de cerveza, sepa que hay formas de practicar higiene emocional, de la misma manera en la que se previenen enfermedades al comer adecuadamente, hacer ejercicio y tomar suficiente cantidad de agua.

Atención al dolor emocional

Al tener una tos, un rasguño o un malestar en el estómago no es necesario ir corriendo a urgencias médicas. Por lo general, se tratan en casa, sin la intervención de un médico.

Winch dice que pasa lo mismo cuando se trata de pequeñas lesiones psicológicas. Al aplicar primeros auxilios emocionales las personas cuidan de su bienestar psicológico sin la ayuda de un profesional de salud mental.

Evaluar sus emociones y validarlas o entenderlas es lo primero que recomiendan los psicólogos. Vélez aconseja revisar las más recientes metodologías en terapia como el mindfulness, un estado de consciencia plena en el que al explorar qué pasa con las emociones propias se sugiere responderse con una actitud curiosa y propositiva. “De esta manera se podrían prevenir muchas enfermedades mentales”.

También desarrollar la conciencia de tratar sus lesiones emocionales y encontrar técnicas de primeros auxilios individuales es importante. No hay un manual generalizado para tratar a cada una. Lo que sugiere Winch es calmar su dolor interrumpiendo los ciclos de pensamientos dañinos que resuenan la mente o reconstruyendo los sentimientos de autoestima.

Este estado de conciencia y compasión hacia sí mismo es lo que permitirá detectar un estado emocional bajo antes de que se convierta en un episodio depresivo, por ejemplo. Lo que este especialista y otros recomiendan siempre es prevenir y escucharse con compasión, y si siente que se está saliendo de sus manos, buscar ayuda profesional.

En cuanto a quienes están cerca de seres queridos que ya enfermaron y padecen episodios depresivos o trastornos de ansiedad, los más comunes de las enfermedades mentales según la Organización Mundial de la Salud, se recomienda llamar a la línea amiga de la Secretaria de salud o al teléfono de la esperanza (Ver Radiografía).

Estas son las lesiones psicológicas comunes que pueden requerir primeros auxilios emocionales.

Rechazo

Son los cortes y raspaduras emocionales de la vida cotidiana. Todo el tiempo los humanos sufren rechazos por parte de amigos, compañeros de trabajo o parejas. Diversas circunstancias lo generan. El rechazo no tratado puede causar daño a la autoestima, lo que puede hacer que se comporte a la defensiva y aleje a las personas que lo quieren.

Fracaso

Frecuentemente se falla al buscar metas, al perder un examen o al ser despedidos y estos son como resfriados que, si no se tratan, pueden convertirse en neumonías psicológicas.

Soledad

Es normal tener periodos así, pero el problema con la percepción de soledad es que de forma crónica incrementa su probabilidad de una muerte temprana en un 14 %, causa presión arterial alta, colesterol alto y suprime el funcionamiento del sistema inmunológico, haciéndolo vulnerable a enfermedades y dolencias. Esto de acuerdo con un meta-ánalisis publicado en la revista Perspectives on Psychological Science.

Pérdida

Regularmente se experimentan pérdidas: cuando los familiares o una mascota fallecen, un amigo se muda de la ciudad o los hijos se van de la casa. La forma en que reconstruye su vida después puede determinar si es emocionalmente más fuerte o psicológicamente más débil. Saberlo le ayudar a buscar la ayuda adecuada.

Baja autoestima

Es como tener un sistema inmunológico emocional debilitado: lo hace más vulnerable y más propenso a sufrir más lesiones psicológicas.

Rumiar

Es fácil quedar atrapado en sentimientos tristes o de enojo y algunas veces resulta difícil pensar en otra cosa, pero hacerlo es como quitar las costras en una herida: no les permite curarse.

Culpa

De forma excesiva puede secuestrar su atención y dificultar la concentración en sus actividades. Perdónese como lo haría con un buen amigo.